La Asociación Ciencia a la Carta y la Fundación Soliss colaboran en la promoción de la cultura científica en municipios de Castilla-La Mancha. El apoyo económico de la Fundación Soliss permite al colectivo de divulgación ampliar su ámbito de actuación, contar con intérprete de lengua de signos española en todas sus actividades y reforzar las propuestas dirigidas a colegios e institutos, entre otras iniciativas.
El principal objetivo del acuerdo entre ambas partes es dar visibilidad al proyecto de divulgación científica y sufragar la adquisición de material fungible y los costes de desplazamiento, además de apoyar la promoción de actividades o financiar la interpretación en lengua de signos española, entre otros gastos subvencionables.
El colectivo Ciencia al a Carta, integrado por más de treinta científicos vinculados a las universidades de Castilla-La Mancha y Complutense de Madrid, Consejo Superior de Investigaciones Científicas y empresas privadas, entre otras organizaciones, es una iniciativa transversal, versátil, sostenida y solidaria, además de independiente, y trabaja sin ánimo de lucro.
Desde noviembre de 2017, Ciencia a la Carta ha desarrollado cientos de actividades gratuitas y abiertas al público general en municipios de Albacete, Ciudad Real, Cuenca y Toledo, entre las que destacan el ciclo conferencias ‘Maridajes cuánticos’, en la Biblioteca de Castilla-La Mancha, el Festival Internacional ‘Pint of Science’, el “Día de Pi” o la participación en el Día Internacional de la Mujer y de la Niña en la Ciencia, así como decenas ediciones de la sección de divulgación científica ‘CienciaTres’ en la Cadena Ser en Castilla-La Mancha.
El apoyo financiero de la Fundación Soliss permite ampliar el ámbito de actuación y potenciar el programa de actividades para niños y adultos, particularmente si pertenecen a colectivos con necesidades especiales”, y es una muestra más del compromiso de la Fundación Soliss con el fomento de la cultura científica y, de forma específica, su apoyo a las actividades que implican beneficio social en relación con la preservación del medio ambiente y la divulgación de la ciencia como parte de la cultura.
Es vital divulgar la ciencia para favorecer la comprensión del entorno, pues fomentar el conocimiento científico es imprescindible para que la sociedad respalde la inversión pública en investigación y ciencia. También es necesario fomentar vocaciones y hay que empezar a trabajar en los peldaños más bajos del sistema educativo. Por eso Ciencia a la Carta desarrolla tantas actividades dirigidas alumnos de Infantil y Primaria.
Lo más importante es que esta divulgación es que se desarrolla de un modo ameno y divertido, pero nunca exento de rigor, y está dirigida a colectivos a los que a menudo no se llega como el mundo rural, con especial hincapié en colectivos de mujeres y niños.
